Un pac-man en el Savoy


Todo lo que está en mi nube
es nada más que tu sermón fatal,
si tu grito es un ladrido
y mi cuchillo es un rayo cruel.
Toda esa batería de risa rubia
de barrio especial,
las nuevas supersticiones,
la bobera de un nuevo pac-man.
Nuestro pac-man no es de nadie,
pero el mono es de él.
A veces gana, a veces pierde
(como todo jugador).
Un buen par de ojos de vidrio
y tu mirada tiende a mejorar
las nuevas supersticiones,
la bobera del nuevo pac-man.