La Mujer De Pedro


Y Pedro llega tarde una vez más y ella despierta,
se hace que duerme y él le habla igual algo que inventó en el bar
y ella sabe la historia,
si tuviera un peso por cada desilusión.

Y cuántas mañanas puedes enfrentar, puedes olvidar,
cuántas promesas puedes ignorar
antes de cortar esas cadenas que hay en tu corazón.

Días, semanas, meses y años que pesan, decía,
pero esta noche Pedro encontrará su cama vacía
y en un tren, ya tan lejos,
se encuentra una mujer su bolso y un ayer.

Y cuántas mañanas puedes enfrentar, puedes olvidar,
cuántas promesas puedes ignorar
antes de cortar esas cadenas que hay en tu corazón.

Cuántas mañanas puedes despertar, nada que olvidar,
cuántas promesas te puedes regalar
allá en otro lugar, porque aprendiste lo que es el corazón.

Y Pedro llega tarde una vez más.